¿Cómo Combatir una Plaga de Gatos?

31 octubre 2016

¿Son los gatos callejeros una plaga? Es usual encontrar gatos en urbanizaciones y locales viviendo a expensas de la limosna ciudadana. Es decir, colonias de felinos son atraídos por el fácil acceso a la comida, bien porque les alimentan o por una inadecuada eliminación de residuos orgánicos, así como por la seguridad que se les ofrece.

El número de gatos que forman la colonia en las ciudades depende de la oferta alimentaria, procedente de los vecinos, donde generalmente la proporción de hembras suele ser mayor. Los grupos de gatos aumentan con rapidez, ya que las felinas paren unas tres veces al año, haciendo un total de diez crías, aproximadamente. Es entonces, cuando los grupos de gatos crecen y se hacen numerosos, acarreando problemas a la ciudadanía.

 

¿Qué hacer con una plaga de gatos?

En primera instancia, aclarar que estos mamíferos son muy limpios y cuidan su higiene. Sin embargo, pueden provocar problemas de malos olores por el orín, heces, o restos de orgánicos; además, los ademanes por sobrevivir a los que se exponen los callejeros acarrean enfermedades infecciosas, como  toxoplasmosis o tenia, que pueden transmitir a personas por vía orofecal (de las heces del animal a la boca del humano), o por infecciones derivadas de mordiscos -siendo este último caso muy inusual. Asimismo, los felinos en celo provocan gran alboroto. En el caso de llegar a la situación descrita por la presencia masiva de una plaga de gatos habrá que hacer algo para remediarlo.

Eliminar a los animales de la zona -capturándolos y darlos en adopción, por ejemplo-  es una opción a corto plazo porque si las condiciones ambientales son óptimas otros felinos ocuparán la zona.  El Ayuntamiento es donde debes denunciar una plaga de gatos. En el caso de que no apliquen medidas, contacta con una protectora o busca ayuda en asociaciones de animales o refugios. La buena acción es esterilizar y desparasitar a colonia y alimentarlos, aunque sólo aquellos con carné especial, lo que permite controlar su número de ejemplares. La castración es la principal medida, aplicada a hembras para reducir la población y a los machos para evitar peleas y maullidos, sobre todo en época de celos.

También pueden contactar con empresas de sanidad ambiental para que pongan solución al problema de plagas domésticas.

Las instituciones públicas y privadas deben esforzarse por mejorar la calidad de vida del gato callejero evitando zonas sobrepobladas sin matarlos. Así es como se debe combatir una plaga de gatos.  Aquellos que hacen uso de veneno como medida para eliminar gatos serán sancionados con elevadas cuantías económicas.

 

¿Es lícito alimentar a los gatos callejeros?

Las ordenanzas municipales de cada localidad deciden si es lícito alimentar a animales en la vía pública; en España la tendencia es prohibirlo. Generalmente en la localidad se forman agrupaciones sin ánimo de lucro que controlan los gatos callejeros, con el fin de aportarles buena calidad de vida y evitar conflictos a la ciudadanía. Los miembros suelen ser los únicos autorizados a alimentarlos, siempre con comida seca -pienso- para evitar el reclamo de otros animales como gaviotas en zonas costeras.